Fueron identificados los cuerpos de la uruguaya Graciela Ponce de León y su esposo, el argentino Gino Cattarossi entre los fallecidos hallados este miércoles entre los escombros del edificio de Miami, según confirmó a Montevideo Portal, el cónsul uruguayo en Miami, Eduardo Bouzout.

Ponce de León, de 86 años de edad y Cattarossi, de 89, eran los padres de Graciela Cattarossi (48), la fotógrafa argentina fallecida en el colapso, que a su vez era madre de Stella, la niña de 7 años, tambien hallada en el sitio del derrumbe.

Bouzout dijo a su vez que siguen sin ser encontrados los cuerpos del otro matrimonio de uruguayos que siguen desaparecidos tras la caida del complejo Champlain Towers South de Surfside, Miami.

Ponce de León y Cattarossi figuran dentro del grupo de 10 muertos encontrados este miércoles por el equipo de rescate que trabaja en la zona.

Graciela Ponce de León trabajó como diplomática en la representación de Uruguay ante la ONU, según confirmaron a Montevideo Portal fuentes allegadas a la familia. Primero como funcionaria contratada en la misión diplomática, en la época en la que el Representante Permanente ante las Naciones Unidas era Enrique Rodríguez Fabregat.

Luego, tras trabajar en Cancillería varios años, viviendo entre Argentina y Uruguay, para luego volver a trabajar a Nueva York como primera secretaria en la misión ante ONU, este vez bajo la dirección del Representante Permanente Pedro P. Berro.

«Era una persona que siempre estaba al servicio de los demás», dijo la fuente anteriormente citada, quién agregó que hace más de 30 años la familia Cattarossi-Ponce de León vivia en Estados Unidos.

La fallecida era a su vez, prima segunda del padre de Lorena Ponce de León, esposa del presidente Luis Lacalle Pou.

os cuerpos de rescate hallaron los restos de otras 18 personas en las ruinas del edificio derrumbado en Surfside, Florida, con lo que el saldo de muertes subió el miércoles a 54. La búsqueda de víctimas alcanzó su decimocuarto día, y poco menos de 100 personas aún están desaparecidas, en medio de mensajes cada vez más sombríos de las autoridades.

El subjefe de bomberos de Miami-Dade, Raide Jadallah, dijo a las familias de los desaparecidos durante una reunión privada el miércoles que los trabajadores habían sacado diez cuerpos más y otros restos humanos de entre los escombros, aumentando el número oficial de decesos.

Los socorristas “hicieron una remoción significativa de la pila” de escombros, dijo. “Pudieron bajar a varias áreas para inspeccionar”, agregó.

(Foto: AP / Lynne Sladky)

Los equipos excavaron el martes en el concreto pulverizado que quedó amontonado donde antes se alzaba el edificio sur de las Champlain Towers, llenando baldes que iban pasando por una cadena humana antes de ser vaciados y devueltos a la primera línea de los esfuerzos.

El martes se permitió a la prensa ver de cerca parte de los trabajos en marcha. Los bomberos también publicaron varios videos y se anunció el hallazgo de ocho nuevos cuerpos, la cifra más alta en un día desde que comenzó la operación, hasta hoy. La lluvia y el viento de la tormenta tropical Elsa complicaban la labor, aunque el ojo de la tormenta iba por el norte de Florida, relativamente lejos del lugar.

Los equipos siguen buscando indicios de sobrevivientes, y aunque las autoridades dijeron que su misión aún es hallar personas vivas, son cada vez más pesimistas.

(Saul Martínez/ Getty Images/ AFP)

”Ahora mismo estamos en modo de búsqueda y rescate”, dijo el director de la policía del condado, Freddy Ramirez, en una conferencia de prensa el martes por la noche. “Nuestro objetivo principal ahora es llevar una resolución a las familias”, añadió.

Nadie ha sido rescatado con vida desde las primeras horas del derrumbe del edificio el 24 de junio, cuando muchos de sus residentes dormían.

Los rescatistas continúan buscando huecos en las montañas de escombros donde pudieran encontrarse otros sobrevivientes, explicó el jefe de bomberos del condado, Alan Cominsky. ”Por desgracia, no estamos viendo nada positivo”, precisó.

El mal tiempo que acompaña a la tormenta Elsa dificulta los esfuerzos de búsqueda. Los relámpagos obligaron a los rescatistas a pausar su trabajo durante dos horas la madrugada del martes, afirmó Jadallah. Las autoridades informaron que los vientos de 32 km/h, con ráfagas más fuertes, obstaculizaron los esfuerzos para usar grúas para retirar los escombros más pesados.