Instituciones trabajan para potenciar propuestas que ofrecen las bodegas del departamento

El Espacio Gorlero de Punta del Este fue sede de un encuentro con representantes del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INAVI), el Ministerio de Turismo, la Intendencia de Maldonado y los Municipios que cuentan con bodegas en su territorio.

La Dirección General de Turismo de la IDM indicó en el marco de la actividad- celebrada el pasado jueves 10 de setiembre- que el trabajo en conjunto entre el sector público-privado tiene como objetivo principal valorizar el universo de propuestas en base a este producto.

El departamento de Maldonado, reconocido internacionalmente por la ciudad balnearia de Punta del Este, tiene un perfil innovador que lo posiciona como la región emergente en la producción vitivinícola del país.

En los últimos años, se ha consolidado en materia turística el proyecto Los Caminos de la Vid y Los Olivos, impulsado por la Intendencia de Maldonado junto a establecimientos locales.

Historia

El vino llega a Uruguay durante segunda mitad del siglo XIX, de la mano de familias inmigrantes que traían su saber desde el Mediterráneo. Hacia 1870 se establecen dos viñedos en suelo uruguayo: el del vasco francés Pascual Harriague en San Antonio Chico (Salto), y la granja del catalán Francisco Vidiella en Colón (Montevideo).
En 1878, Vidiella ya había adaptado la primera variedad de vid, de procedencia europea, al clima uruguayo. Al poco tiempo, Harriague hizo lo suyo con una variedad que importó de Concordia.
Con la experiencia de estos pioneros como estandarte, más el trabajo de otros tantos que los siguieron, la vitivinicultura se afianzó en Uruguay y alcanzó un crecimiento que logró sustituir buena parte de la producción extranjera.
Los establecimientos se multiplican y la actividad se vuelve próspera. Hasta que en 1898 un insecto plaga -la filoxera- se instala en los establecimientos, cambiando para siempre el modelo productivo.

La reconversión filoxera

Extinguir con fuego todas las cepas atacadas por la plaga fue la disposición del gobierno para hacer frente a la crisis, además de obligar a sustituirlas por plantas injertadas sobre pie americano.
La recuperación fue lenta, pero efectiva. Y en el último año del siglo XIX, la producción comenzó a retomar su senda de crecimiento.
Lo novedoso de este proceso fue que la vid injertada resultó ser sensiblemente más productiva que la de plantación directa. Ello, junto a la adopción de fertilizantes orgánicos, creó una nueva vitivinicultura.
Fue así que el vertiginoso crecimiento de esta industria logró que se la considerara como un auténtico símbolo de civilización y progreso.

Las tintas

Tannat: El Emblema

La cepa que le ha valido a Uruguay un lugar reconocido en el mundo del vino e incontables premios internacionales, fue traída del sudoeste de Francia en 1870 por Pascal Harriague. Los suelos arcillosos, sumados a la brisa atlántica, ofrecen condiciones excepcionales para esta variedad. Uruguay es hoy el principal productor de Tannat, con volúmenes de elaboración que superan, incluso, los de su lugar de origen.

Merlot

Es un vino que se caracteriza por ser versátil y fácil de beber, y por poseer un color azul intenso que le da nombre —en el dialecto de Burdeos, de donde es originaria la cepa, merlot quiere decir mirlo—. En Uruguay se consiguen vinos de textura suave, aterciopelados, de sabor afrutado y fresco, y mucha elegancia.

Cabernet Sauvignon

Originaria de Burdeos, es la cepa que domina el mundo de los tintos. Logra vinos de color rojo rubí intenso, aromas suaves de gran armonía y, en boca, equilibrados y elegantes, con toques de pimienta o morrón verde, y en ocasiones, notas de vainilla, sabores ahumados, tostados.

Cabernet Franc

Procedente de la región del Médoc francés, la cepa Cabernet Franc es de brotación y maduración temprana, vigorosa y de porte horizontal y erguido. Los aromas de esta variedad muestran características vegetales, un color no demasiado intenso, mediana acidez y medio cuerpo.

Marselán

De origen francés, la cepa Marselán nace de la mezcla entre Cabernet Sauvignon y Garnacha, que se empezó a cultivar en la década del 60 en la región de Marseillan. De racimos pequeños o medianos, frutos redondeados de color oscuro y poco jugosas. El vino se caracteriza por ser complejo, equilibrado, con cuerpo y aromático.

Syrah

Vinos de colores intensos, que surgen de su uva roja muy pigmentada, y aromas que van desde los florales en ejemplares jóvenes hasta los animales y especiados luego de su crianza y maduración. En boca son complejos, con cuerpo y elegancia, y suave sabor a frutos rojos -ciruelas, cerezas, fresas, frambuesas-, pimienta, y finales armónicos de notas tostadas, caramelo y vainilla.

Pinot noir

Esta variedad proveniente de Borgoña tiene gran fama, tanto por sus virtudes —dar vinos sutiles, elegantes y de gran sofisticación— como por las dificultades que presenta su elaboración, debido a lo susceptibles que son sus bayas a las inclemencias climáticas. En Uruguay los enólogos han sabido sortear estos obstáculos con mucha maestría, logrando ejemplares de excelencia.

Otras variedades: Tempranillo, Arinarnoa, Folle Noire, Moscatel Hamburgo, Garnacha, Alicante Bouchet, Cinsaut, Egiodola, Gamay, Nebbiolo, Malbec, Barbera, Mourvedre, Aubun, Carignan, Jurancao Noir, Petir Verdot.

Las blancas

Sauvignon blanc

Un vino muy sabroso y expresivo que sorprende por su exuberancia y sus intensos aromas. El sauvignon blanc es otro de los favoritos entre los blancos. Proviene de una uva muy influenciable que, cosechada en su punto óptimo, da vinos muy frescos y cítricos.

Chardonnay

Como el pinot noir, el chardonnay es originario de Borgoña. Existen ejemplares suaves, frescos y elegantes, con notas de frutas tropicales y acidez moderada, y otros que van ganando complejidad y aromas de avellanas, vainilla y miel gracias a su paso por barricas de roble. Este vino es perfecto para maridar con pescados y carnes blancas.

Viognier

Uva originaria del valle de Ródano, Francia, con potencial para producir vinos con cuerpo y carácter suave. De aromas naturales y delicada elaboración, es una variedad tardía, de racimo pequeño, compacto y cilíndrico que ofrece vinos versátiles y de sabor peculiar.

Albariño

Es una cepa que ha encontrado en Uruguay condiciones inmejorables para su desarrollo. Originario de Galicia, el albariño está ganando popularidad entre los paladares más exigentes a la hora de los blancos, y los de nuestro país están obteniendo mucho reconocimiento por su calidad.

Otras variedades: Pinot Blanco, Falso Pinot, Semillon, Moscatel Blanco, Ugni Blanc, Riesling, Chenin, Arriloba, Silvaner, Gewurztraminer, Torrontés, Muscat de Frontignan, Muscat Ottonel, Gross Manseng, Marsanne, Roussanne, Pinot Gris, Sauvignon Gris, Riesling Renano, Riesling Itailano.

Las regiones

Uruguay posee características inmejorables para la producción de vinos de calidad.
Está ubicado entre los paralelos 30° y 35° de latitud sur, zona de las mejores áreas cultivables de Argentina, Chile, Sudáfrica y Australia.
Es el único país del continente que, con influencia del océano Atlántico, se asemeja a Burdeos en temperatura, lluvia y vientos, y posee diversidad de buenos suelos con diferentes niveles de drenaje y fertilidad.
Es, además, un país que combina la tradición, el conocimiento y la experiencia de la producción artesanal del viejo mundo con la energía e innovación del nuevo. El resultado son vinos singulares, con un perfil propio y características que sorprenden.

Fuente: INAVI

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