Rentistas festeja su noche histórica, ganó la semifinal en los penales 3:2 a Liverpool luego del empate 1:1 en el Estadio Centenario. Nicolás Rossi, el héroe, atajó tres penales. Define con Nacional.

El equipo de Alejandro Capuccio definirá con Nacional y sacó a Peñarol de la próxima edición de la Copa Libertadores.

El partido comenzó con los negriazules tratando de tomar las riendas del juego, con su habitual apuesta a la posesión y con un remate de media distancia de Cándido que avisó de las intenciones.

Y los negraizules eran dueños del trámite, con la manija de Hernán Figueredo, la intensidad de Fabricio Díaz y la amenaza constante de la apertura que pudo llegar a los 17′.

Un pase atrás corto de Fratta fue interceptado por Juan Ignacio Ramírez, que eludió al golero, se tomó su tiempo para definir con el arco libre y tanto espero que Damián Malrrechaufe llegó a tirarse para evitar la caida de su arco, en una acción que valió muchísimo.

Con Cristóbal cortando con faltas, Colazo que no podía desnivelar y Acosta y Vega olvidados en delantera, los Bichos Colorados no molestaban en ofensiva y estaban dedicados a contener a su adversario, visiblemente superior.

Pero los de Méndez tenían una faceta que aún no podían resolver entre los apuros y la mala suerte, como le sucedió promediando los 30′ con un córner desde la derecha que remató Federico Pereira en el área y el travesaño le dijo que no.

El partido tuvo un quiebre pasado los 40′ cuando Fratta fue a buscar un balón con Fabricio Díaz al que terminó pisando y Matonte, tras revisar el llamado del VAR y observar la jugada en el monitor, decidió expulsar al zaguero.

Un golpe impensado para los de Cappuccio que mandó a la cancha a Amondarain por Acosta para rearmar la defensa y tratar de sostener la igualdad sin goles al descanso.

Un remate de Ramírez que se fue apenas ancho y un zapatazo de Alan Medina otra vez al travesaño, terminaron un primer tiempo con un solo equipo apostando a ganar, pero que no supo traducirlo en cifras.

Uno por lado

El complemento comenzó con el mismo trajinar, los de Belvedere dueños de la pelota, apostando a ofender y los colorados marcando, cerrando espacios y esperando una contra fulminante para conseguir quebrar la paridad.

Un desborde de Pereira por derecha terminó en una asistencia a Alan Medina que remató cruzado pero sin acertarle al arco, una nueva chance que no se concretó para un equipo que atacaba bien hasta el puntillazo final.

Alguna subida aislada de Abero y las pelotas quietas eran las armas preferidas del equipo campeón del Apertura para acercarse, ante un adversario bien parado y que apostó a darle dinámica a las acciones.

El ansiado y merecido gol de los negriazul llegó a los 78′ tras una gran tapada de Rossi que despejó dando rebote, el cual tomó por derecha Franco Romero sacó un buscapié al medio que Ramiro Cristóbal quiso despejar, pero con tanta mala suerte que terminó metiéndose en su propia valla.

Una diferencia que pareció ser definitiva, porque Rentistas estaba con un hombre menos, casi sin llegar, superado en cancha, pero fue algo que no creyó su entrenador que encontró soluciones en el banco de suplentes.

El empate llegó a los 85′ cuando un balón largo fue bajado de cabeza por Salomón Rodríguez para otro ingresado Franco Pérez, que en el área ajustició a Lentinelly para el inesperado 1-1.

Al alargue

Y el tiempo suplementario comenzó con la misma tónica del todo el trámite, los de Méndez con la pelota y buscando, ante un rival cerradito, que se defendía y jugaba corto al tener uno menos en cancha.

Pero increíblemente los Bichos Colorados tuvieron una clarísima para el segundo cuando en un centro al área, Romero falló al despejar, le quedó a disposición de Salomón Rodríguez cuyo remate tapó Lentinelly para apagar las alarmas.

Todo siguió igual hasta el segundo tiempo del alargue, con dos equipos que no se sacaban ventajas y con los penales a 15′ de su concreción.

Rosso, que fue uno de los cambios que planteó Liverpool, metió un centro sobre los 114′ que Gonzalo Bueno paró y remató pero Nicolás Rossi voló para tapar y mantener todo incambiado.