El partido comenzó con los locales tratando de manejar la pelota y zafar de la presión alta que le proponia su rival, para con eso adelantarse en la cancha queriendo ofender.

Estupiñán y Caicedo se asociaban por derecha de buena manera y obligaban a Nández, con la ayuda de Canobbio y Valverde, a tener que extremar esfuerzos para no dejar espacios.

Del lado celeste, alguna corrida de Agustín Canobbio en forma individual o pase de Nicolás De La Cruz para la potencia de Darwin Núñez, fue gestando algo más pensando en la valla contrincante.

Un remate de Gruezo de media distancia que se fue muy ancho, fue moviendo las acciones de un partido con escasas llegadas y mucha disciplina táctica para no dejar hacer al rival.

Y a los 15′ llegó una clarísima para la Tri, cuando Enner Valencia recibió de espalda, giró para desairar a Viña, encaró y sacó un zapatazo rastrero que sacó Rochet yendo sobre su izquierda.

Eran minutos donde la pelota no pasaba tanto por Valverde o De la Cruz y eso lo resentía el fútbol de ataque uruguayo, algo inconexo y salvo acciones inidviduales, controlado mayormente.

Las espaldas de Piquerez y Viña eran buscadas con pelotas largas a Enner Valencia y subidas de Angelo Preciado, lo que mostró alguna falencia, ante un combinado que le costaba defenderse con la posesión y estaba errático a la hora del pase.

A los 34′ se dio otra gran posbilidad para los locales. Una jugada que fue de izquierda a derecha, que comenzó Jhojan Julio y terminó con un disparo potente y cruzado del propio Preciado, pero Rochet volvió a sacar con estupenda estirada.

Pero el gran golpe lo dio la Celeste a los 38′. Una jugada que inicio Cäceres y pasó por De la Cruz, encontró una estupenda corrida de Maximiliano Araújo por izquierda, para encarar, enganchar y asistir a Agustín Canobbio, que en posición de nueve, recibió de espalda, giró, remató e infló las redes para el 1-0.

Un tanto que llevó tranquilidad para seguir realizando el planteo pensado para un duelo en la altura, bajando revoluciones, ganando espacios para tomar aire y con la intención de marcar lejos de la valla propia.

En las últimas dos acciones de la primera etapa, los ecuatorinaos llegaron al empate. Un tiro libre cruzado de Estupiñán rebotado generó un córner a los 45+5′. Del mismo surgió el centro donde Félix Torres le ganó el duelo a Matías Viña para conectar y colocar el 1-1, con que se fueron al descanso.

Otro golpe

En el complemento Bielsa decidió meter mano al equipo, colocando a Cristian Olivera y Felipe Carballo por Darwin Núñez y Nicolás de la Cruz, buscando soluciones en ambos sectores de la cancha.

Pero las malas nuevas llegarían a los 48′ cuando un balón que encontró solo a Estupiñán por derecha generó un clarísimo penal cometido por Nahitan Nández que le dio la chance del segundo a la Tri. Enner Valencia lo ejecutó, pero le erró al arco.

Respiro profundo en un duelo que se había hecho cuesta arriba, principalmente por la banda izquierda donde no aparecía firme la defensa.

Una contra liderada por Federico Valverde, que combinó con Canobbio, encontró un remate del Pajarito que se fue alto, para luego aparecer el segundo local.

Un saque de banda por derecha terminó en un centro rasante de Kendry Páez para que Félix Torres, una vez más anticipara a Viña y tocara en el área chica para el 2-1, merecido a esa altura.

Un golpe duro con vistas al cierre, donde ya habían ingresado Mathías Olivera y luego Facundo Torres y Facundo Pellistri, para renovar la velocidad por los extremos.

Y estos le dieron un segundo aire al equipo para ir por la igualdad, pero se repetían en centros al área con la particularidad que era una alineación sin altura para buscar de esa forma.

El tiempo fue pasando y no llegaban acciones claras, con un contrincante bien parado, defendiendo de buena forma y sosteniendo una victoria del local que era muy importante.

La última llegó con un estupendo centro de Valverde que fue a buscar Torres para conectar, el arquero la tapó y Sampaio cobró falta de ataque para luego dar por finalizado el juego. Protestas celestes por una posible infracción sobre el formado en Peñarol del arquero, que todo el cuerpo arbitral desestimó.

Caída justificada de Uruguay, que fue cayendo en su rendimiento, no mostró la eficacia de la zona de volantes del debut y sumó su primera derrota en Eliminatorias.

Fuente – Montevideo Portal .